El software libre tambien es negocio

Existen muchos mitos relacionados con el uso del software libre, entre ellos que todas las modalidades de este tipo de software son gratuitas; si bien alrededor de este producto hay toda una filosofía que privilegia el uso público del conocimiento, existen alternativas rentables de negocio que se pueden consolidar a partir de él.

La comercialización del software libre trae al mercado un nuevo modelo de negocio que se estructura a partir de los servicios y no del producto; es decir, no se paga por el licenciamiento del uso del software sino por los servicios adicionales que supone la adquisición del programa, como la implementación de la plataforma, la capacitación del personal y el soporte técnico.

Según la Free Software Foundation, el software libre es un modelo que da a los usuarios la libertad para ejecutar, copiar, distribuir, estudiar, cambiar y mejorar el programa. De modo más preciso, se refiere a cuatro libertades de los usuarios del software: la primera de ellas es que se puede usar y distribuir libremente; la segunda, que se puede modificar y adaptar a las necesidades de cada persona o empresa; la tercera, que se tiene la opción de publicar esas actualizaciones; y la cuarta, que las personas se pueden lucrar de ello. Las negociaciones que se estructuren a partir del software libre deben respetar esa filosofía difundida a nivel mundial.

El modelo tradicional de negocio que impone el software privativo (Microsoft, Mac) hace énfasis en el producto, lo que significa que el usuario cancela un monto de dinero por la información contenida en un CD. La relación entre proveedor y consumidor termina en el momento de la copra, mientras que con el software libre comienza allí.

Entre el software privativo y software el libre existe una gran diferencia en su modelo de negocio que puede entenderse de la siguiente forma: cuando un empresario adquiere una licencia de software privativo solo puede implementarla en un computador, generando así la necesidad de comprar un número de licencias determinadas de acuerdo a la cantidad de equipos que posea; de otro lado, el software libre busca proveer de tecnologías que permitan a una empresa no depender tecnológicamente de otra, de modo que sean autónomas en sus decisiones y tengan la posibilidad de elegir qué tipo de tecnología van a utilizar.

“El software libre comercial no siempre es la alternativa más económica del mercado. Hay una ventaja clara y es que es que no se tiene que pagar por el licenciamiento del software, y eso en cierta medida te va a rebajar ciertos costos, igualados al momento de pagar por la implementación, la asesoría y los servicios adicionales que comprado un software privativo no se tendrían; es ese sentido hay valor agregado, que le da una ventaja competitiva frente al modelo de negocio del software privativo”, anota Santiago Padilla, socio de la empresa Soluciones Kazak

Padilla afirma que algunos empresarios se resisten a implementar en su compañía el software libre porque sostienen “que al rodearse de los grandes, ellos llegarán a serlo; además en un comienzo es un tanto difícil para los empleados de una empresa familiarizarse con el entorno gráfico del aplicativo. La mayoría de las personas están acostumbradas a la forma y a la ubicación de de los software privativos como Mac o Microsoft, pero con las capacitaciones llegan a adaptarse rápidamente”.
Entidades como el Instituto Popular de Capacitación (IPC) y las Empresas Públicas de Cali desarrollan todas sus actividades administrativas y operativas a través de software libre, sin haber tenido por ello dificultades sustanciales con su uso; además, las empresas pueden adaptar el programa que adquirieron dependiendo de sus necesidades particulares con el fin de desarrollar un producto que responda con más efectividad.

El software libre en el mundo

En Colombia existe una comunidad muy informal de software libre que está conformada por todas las personas que son afines con la filosofía de este programa y que trabajan en su promoción y difusión. Así mismo, desde hace 8 años, existe también una entidad sin ánimo de lucro como Parquesoft, que trabaja con el propósito facilitar la creación y desarrollo de empresas en la industria del conocimiento a partir software libre, la cual posee actualmente 16 sedes en todo el país y ha ayudado a consolidar alrededor de 300 empresas.

Aunque resulte paradójico, los principales usuarios del software libre en el mundo son los países desarrollados, en ellos existe una cultura más abierta a las nuevas propuestas y se privilegia la efectividad antes que las marcas, además no hay tantos mitos en torno a la utilización y la calidad del software libre, como sí ocurre en Colombia. Países como Estados Unidos e Inglaterra son abanderados en el uso masivo de este tipo de herramientas.

Mas información: http://www.culturaemedellin.gov.co